Uno cortito.

Dispongo de 10 minutos. Lo suficiente para hacer una reflexión escueta, pero no por eso poco aguda.
El tema. Salir a comprar, en busca de la Compra Perfecta, desde ahora CP. Esa que como regalo haga sonrojar a cualquiera. Que emocione. Que guste. Casi excite si se quiere.
Recorro negocios buscando una CP, pero nunca florece en su plenitud. Siempre algún anexado de lentejuelas o estampados transforman la CP en una CC, llámese Compra Chota. Al final del día, ya casi hemipléjica de tanto patear negocios (claro, no textualmente), termino conformándome con esa CC que está bien, que me gusta, pero nada más.
Maldigo salir a comprar insumos. Sobre todo los primeros sábados de cada mes. Conglomerado de personas. Y niños. Con esos vendedores deseosos de vender, esa falsa felicidad que transmiten cuando te asomás en su local, esa sobrevaloración que hacen de tu persona sin siquiera preguntarte cómo te llamás, qué música escuchás o cuál es tu gusto preferido de mermelada. Utilizando sobrenombres como negri o gordi para dirigirse a tu persona. Impúdicos. Simples peones de turno, cumpliendo objetivos que sólo tienen como fin aumentar la financiación de su patrón, no así de su sueldo. Bajo. Negro.
Ahora bien. Todo lindo, muy lindo. Ese jean, esa remera o ese vestido que gracias te entró, pero que para sus ojos te queda divino. Hipócritas.
Pero claro, si querés cambiar la CC, te miran con cara de muslo sin tonificar, y te obligan a volver de lunes a viernes. Porque aunque no haya nadie en el local, ellos están muy ocupados para atenderte. Ahora ya no sos especial. Sos un insecto zumbando en el local. Molestándolos. Pero cuando arribé a comprar el CC, no. Ahí les sobraba el tiempo. Te lo cedían. Ahí estaban contentos. Ahí te hacían sentir importante. Omnipotente. Dios. Ahí te escuchaban. Ahí eras gracioso. Ahí te decían negri.
Bipolares. Todos.
Basta! Este año no van a haber más CC. Basta de regalos. Este año, tarjetita artesanal, algún beso y a la bolsa. Salvo que tropiece con ese vestidito que tanto me gusta, y bueno, lo compre.

1 comentario:

Lucio dijo...

Guarda que lo que parece una CP puede terminar siendo una CCsima (no hay nada que aclarar, pero me copa poner oraciones con coma entre paréntesis).

Una vez le compré a mi hermano una taza que decía "Para que tome solamente Edith". Me pareció retegracioso. Ese día me di cuenta de que mi familia y yo no nos reímos de las mismas cosas.

Ok, no era una CP, pero por $2 qué querés. Como dijo Alberto, todo es relativo.